Resumen temporada 2007

La temporada comenzaba el primer dia de enero con tres torneos de los denominados importantes, como son el de Adelaida, Doha y Chennai, todos en superficie dura, como preparación al primer Grand Slam de la temporada. En el primero se impuso Novak Djokovic, en el segundo Ivan Ljubicic y en el último el belga Xavier Malisse.
La siguiente semana, justo la anterior al Australian Open, se disputaron los torneos de Auckland, con victoria del español David Ferrer y Sydney, en el que el americano James Blake hizo lo propio.
De esta forma se llegaba al Grand Slam australiano. En un principio podía parecer que Federer no llegaba en las mismas condiciones que los años anteriores, ya que había perdido ante Roddick en un enfrentamiento previo, pero ni el estadounidense ni la gran sorpresa Fernando González, con su primera final de Grand Slam pudieron evitar que el suizo se adjudicase el primer gran campeonato de la temporada, sin ni siquiera ceder ni un solo set.

Ya en febrero, sin torneos decisivos en el calendario, cabe destacar entre otros el segundo torneo de la temporada para Federer en Dubai, el inicio de la buena racha de Guillermo Cañas con su victoria en Brasil y la derrota de Australia en la Copa Davis ante Bélgica.

En marzo comenzó la temporada de ATP Masters Series, con el de Indian Wells en primer lugar, en el que se impuso Rafa Nadal, y que significaba su primer torneo del año.
Dos semanas después, Djokovic vencía en el Masters Series de Miami, confirmando su candidatura a estar entre los grandes durante el resto de la temporada.
Durante este mes se produjo una de las sorpresas de la temporada, o quizá sería mejor decir dos de las sorpresas, ya que ese fue el número de veces que Guillermo Cañas se impuso a Federer, produciéndose además en dos torneos consecutivos.

Con el mes de abril llegaba la temporada de tierra batida, y con ella el dominio absoluto de Nadal sobre todos sus rivales, ganando todos los torneos que jugó de forma autoritaria y casi arrolladora, tanto en el ATP Masters Series de Monte Carlo como en el Conde de Godó de Barcelona. Cabe destacar también que Djokovic seguía a su ritmo, venciendo en Estoril.
Además España caía en la Copa Davis ante Estados Unidos, sin ninguna discusión. En esta fase no jugaron ni Nadal ni Ferrer.

Llegó mayo y Nadal seguía con su racha triunfal de victorias sobre tierra batida, venciendo en la final del Masters de Roma a Fernando González. En este torneo Federer volvía a caer, esta vez ante Filippo Volandri. Es por ello que se puso en duda por primera vez en mucho tiempo su hegemonía en el tenis y estado de forma en las pistas. Pero la respuesta del suizo no se hizo esperar. Se impuso y de qué manera nada más y nada menos que a Nadal en la final del Masters Series de Hamburgo. Esta victoria significó muchas cosas: en primer lugar, Federer acallaba a los que sólo una semana antes le habían criticado. Después conseguía vencer a Rafael Nadal por primera vez en mucho tiempo. Además esta victoria fue sobre tierra, lo que detuvo el récord que el español aumentaba torneo tras torneo de 81 victorias consecutivas sobre su superficie favorita, la tierra batida.

Aunque Roland Garros, el segundo Grand Slam de la temporada, comenzó a disputarse los últimos días de mayo, la fase decisiva del mismo tuvo lugar en junio. A él, y a pesar de su última derrota ante Federer, Nadal llegó como el principal favorito, acreditado por sus dos títulos anteriores en la arcilla parisina. El suizo por su parte quería alzarse por fin con el título que más deseaba desde hacía muchos años. Todo pareció planeado, ya que a la final llegaron los dos hombres que llevaban liderando la clasificación mundial durante años, pero Nadal impuso su ley y se llevó el ‘torneo de los mosqueteros’, con lo que conseguía su tercer título consecutivo, y dejaba a Federer un año más sin el tan anhelado trofeo.

Con Roland Garros acabó la temporada de tierra y comenzó la de hierba, en la que cambiarían las tornas respecto a Nadal y Federer.
Los torneos preparatorios de Wimbledon más importantes fueron los de Londres y Halle, con triunfos de Roddick y Berdych respectivamente.
Al tercer grande de la temporada Federer llegaba casi como el único candidato a la victoria final, ya que llevaba cuatro años consecutivos imponiéndose, pero en la final estuvo a punto de saltar la sorpresa. Una vez más, nuestro Rafa y él se enfrentaron en el que ha sido declarado por los expertos como el partido del año. En él se impuso el suizo, pero Rafa se lo puso mucho más difícil de lo que cabía esperar, ya que el resultado del partido fue de un apretadísimo 7-6, 4-6, 7-6, 2-6 y 6-2 en casi cuatro horas, en el que el español nunca le perdió la cara al encuentro.

Ya en julio, Nadal se impuso en Stuttgart, un torneo menor, y comenzaba la fase preparatoria de la pista dura, para el US Open, el último Grand Slam de la temporada, con diferentes torneos menores.

En agosto hubo dos torneos relevantes antes del abierto americano. Fueron los Masters Series de Canada y Cincinnati. En el primero se impuso el serbio Djokovic, confirmándose favorito para el Grand Slam, y en en segundo venció Federer, consiguiendo el torneo número 50 de su carrera.

De esta forma se llegaba al popular torneo americano en septiembre. Parecía que Federer rompería su racha de tres títulos consecutivos, pero nada más lejos de la realidad, el suizo se impuso una vez más, ante Novak Djokovic.

En este torneo comenzó la gran progresión de David Ferrer, al llegar a semifinales dejando atrás a rivales tan importantes como Nadal o Nalbandián.
En la fase de semifinales de Copa Davis vencieron Rusia y Estados Unidos.

De octubre cabe destacar la gran racha de David Nalbandián, que comenzó en el ATP Masters Series de Madrid, en el que se impuso tras vencer a Nadal, Djokovic y Federer (éste último en la final) y prosiguió en el de París volviendo a derrotar a Rafa y Federer. En este torneo se jugaban muchos jugadores los últmos puestos que daban acceso al torneo de maestros de Shangai. A pesar de su excelente estado de forma, el argentino Nalbandián no entró entre los ocho primeros, y decidió que para ir como suplente prefería no acudir al torneo.

Ya en noviembre se disputó el definitivo ‘Tennis Masters Cup’ en Shangai. Nadal y Ferrer quedaron encuadrados en el mismo grupo, junto a Djokovic y Gasquet. En principio el serbio parecía un fijo para las semis, por lo que los dos españoles se tendrían que disputar la otra plaza. Pero sorprendentemente Ferrer se impuso a todos y cada uno de sus rivales, incluido Rafa, clasificándose como primero de grupo, mientras que Nadal le acompañó como segundo. En el otro grupo pese a comenzar con una derrota ante Fernando González, Federer obtuvo la primera plaza del grupo, con Roddick como segundo. Las semifinales por tanto fueron Ferrer-Roddick y (una vez más) Federer-Nadal. En la primera el alicantino pasó por encima del americano, llegando a la final del torneo más importante de la temporada, en la que posteriormente dijo que había sido “la más grande de su carrera”. En la segunda el suizo no dio opciones a Nadal, con lo que la final a la vista se presentaba de infarto, ya que si bien Roger era el favorito, Ferrer había demostrado que podía dar la sorpresa. Desafortunadamente para el tenis español, no hubo sorpresa posible, ya que el resultado lo dice todo: 6-2, 6-3 y 6-2.

La temporada finalizó en diciembre, con la victoria aplastante de USA en la final de la Copa Davis, ante Rusia.

De esta forma se desarrolló la temporada en la que más cerca estuvo Rafa de Federer. La verdad es que fue una temporada muy entretenida, ya que el dominio tanto del suizo como del español se vio minimizado en diferentes momentos de la temporada por diferentes jugadores que con su estado de forma o racha (según como se quiera llamar) pusieron un poco de alegría al año, como pueden ser Guillermo Cañas, Novak Djokovic, David Nalbandián o en último lugar David Ferrer.
Esperemos que la temporada que comienza en breve nos deje tantas alegrías o más como la que ha terminado, ya que eso significará que Rafa Nadal y el tenis español se encontrarán entre los mejores del mundo.